¿Qué son los Tanques de Acero Inoxidable?
Son recipientes diseñados específicamente para almacenar y procesar productos en la industria de alimentos y bebidas. Están fabricados con aceros inoxidables tales como, AISI 304 y AISI 316L, estos siendo seleccionados especialmente por su resistencia a la corrosión, facilidad de limpieza y propiedades no reactivas. Estos tanques están construidos de acuerdo con normativas que garantizan su aptitud para el contacto con alimentos, previniendo cualquier riesgo de contaminación directa y/o cruzada que pueda afectar la seguridad o calidad del producto.
¿Para qué sirven?
Los tanques de acero inoxidable tienen múltiples aplicaciones en la industria de alimentos y bebidas:
Almacenamiento de ingredientes y productos:
Se usan para almacenar materias prima como agua, leche, jugos y aceites así como productos ya elaborados, listos para ser envasados o incluirse a líneas de procesos en serie.
Procesamiento de alimentos:
Durante el proceso de producción, estos tanques o recipientes facilitan el mezclado, calentamiento, enfriamiento y fermentación de los alimentos, brindando la posibilidad de controlar y monitorear variables tales como: temperatura, viscosidad, entre otras.
Transporte de productos alimenticios:
En la industria de alimentos y bebidas, la higiene y la seguridad son aspectos críticos para garantizar que los productos lleguen a los consumidores en las mejores condiciones. Los tanques de acero inoxidable grado alimenticio juegan un rol fundamental en el procesamiento, almacenamiento y transporte de líquidos y alimentos. Este tipo de tanques está diseñado para cumplir con estrictas normativas de higiene y calidad, proporcionando una solución segura y duradera para el manejo de productos alimenticios.
Características del acero inoxidable grado alimenticio
El acero inoxidable grado alimenticio es un material que cumple con requisitos específicos para ser utilizado en la industria de alimentos. Las principales características de este material son:
Resistencia a la corrosión:
El acero inoxidable es altamente resistente a la oxidación y a la corrosión, lo que permite que los tanques mantengan su integridad estructural en contacto con diferentes tipos de alimentos y bebidas.
Fácil de limpiar y mantener:
La superficie lisa y no porosa del acero inoxidable evita la acumulación de residuos, lo que facilita su limpieza y reduce el riesgo de contaminación cruzada.
Inerte y no reactivo:
El acero inoxidable no reacciona con los alimentos ni altera su sabor, color o aroma, lo que es fundamental para mantener la calidad del producto final.
Durabilidad:
Gracias a su resistencia y propiedades estructurales, estos tanques tienen una larga vida útil, lo que los convierte en una inversión rentable para las empresas.
Ventajas de usar tanques de Acero inoxidable en la industria alimentaria
Cumplimiento con normativas:
Los tanques de acero inoxidable grado alimenticio cumplen con normativas internacionales como las de la FDA y la UE, que establecen requisitos estrictos para materiales en contacto con alimentos.
Prevención de contaminantes:
El acero inoxidable reduce el riesgo de contaminantes que puedan afectar la salud de los consumidores.
Versatilidad:
Estos tanques pueden ser usados para una variedad de productos alimenticios, lo que los convierte en una solución versátil y adaptable.
Normativas y Certificaciones
- FDA (Food and drug Administration) en Estados Unidos.
Reglamento de la UE (EC) No 1935/2004 sobre materiales en contacto con alimentos en la Unión Europea
- Certificación ISO 9001 para la gestión de calidad en los procesos de fabricación.